Una gran importancia se ha dado a este aspecto con el fin de ofrecer un producto capaz de garantizar una plena fiabilidad. Los aspectos
principales que diferencian este producto son:
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El agua rociada es un líquido tratado y depurado meticulosamente. La formación de depósitos y biopelículas queda excluida, sin
perjuicio del respeto de los procedimientos correctos de limpieza y mantenimiento de las máquinas. El riesgo de una
contaminación bacteriana se reduce por tanto al mínimo, con tal de que la instalación se maneje de forma correcta.
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Eliminación del arrastre de gotas por parte del aire que, tras atravesar las superficies de intercambio, es expulsado en la
atmósfera a través de los ventiladores. Para conseguir este resultado, se ha adoptado una solución que contempla inyectar el
agua a la temperatura con la que es abastecida por la red, línea arriba de las baterías de intercambio térmico, y controlar en cada
condición operativa que la relación entre el caudal de aire y el del agua siempre sea mayor que los valores que permiten que se
produzca la saturación.
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El agua de alimentación del sistema SPRAY es agua potable y por tanto, debido a la definición en sí de la misma no está
contaminada por bacterias (Legionella, etc.) dañinas para la salud.
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El agua que se halla dentro de las rampas del sistema SPRAY podría, en caso de no utilizar dicho sistema, recalentarse debido a
la radiación solar. Basándose en la pruebas específicas ejecutadas en el Istituto Zooprofilattico di Pavia (Italia) ha surgido
claramente que en el agua ablandada, tratada según las especificaciones LU-VE no hay proliferación de Legionella Pneumophila.
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Para evitar cualquier tipo de contaminación presente en el agua potable de alimentación se hallan instaladas en el sistema
completo unas lámparas especiales UV capaces de asegurar la esterilización del agua.
Los paquetes adiabáticos son alimentados por el agua de red potable o bien por agua de paso en la cuba de recuperación, sin
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estancación y de todas formas, a una temperatura inferior a 25°C (en la que las bacterias de la Legionella están activas). El agua
que cae de los paquetes adiabáticos no es recirculada.
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Descarga completa de todo el sistema con tiempos diferentes, definidos y fijados por el utilizador.
Gestión de paradas e higiene para enfriadores de líquido y condensadores pulverizados
La solicitud de la normativa VDI 2047-2 relativa al funcionamiento perfecto desde el punto de vista higiénico hace necesario gestionar
las paradas del dispositivo de pulverización de los aparatos.
A continuación se describe dicha operación: la gestión de paradas especifica las medidas necesarias para proteger los componentes
de la instalación contra estancación y consiguiente riesgo higiénico. A nivel higiénico, cabe recalcar el hecho que es preferible aclarar
los componentes en vez de vaciar la instalación. El vaciado expone a la instalación a la penetración de cargas microbiológicas. En el
caso del aclarado la carga potencial es expulsada antes de que se forme.
Principalmente se distinguen dos tipos de paradas, los que, sin embargo, son tratados de manera idéntica en la gestión de paradas de
LU-VE:
• Interrupción del funcionamiento; Completa o reposo parcial de 4 semanas como máximo
• Parada: Puesta fuera de servicio ininterrumpida de la instalación superior a siete días
Cabe tener presente igualmente el tratamiento del agua bruta, visto que la normativa VDI 2047-2 contiene la obligación que establece
que las instalaciones de ablandamiento y de membrana se han de regenerar o aclarar luego de 3 días como máximo.
Considerando que estas instalaciones se auto-generan o se aclaran a través de su propios mandos, no se necesita respetar ningún
procedimiento especial, sino garantizar únicamente la alimentación eléctrica y el suministro de agua.
El periodo para gestionar las paradas se define de esta manera y los procedimientos para gestionar las paradas deben ser llevados a
cabo como mínimo una vez cada siete días.
Los procedimientos se diferencian entre funcionamientos de invierno y de verano.
En modo de funcionamiento de invierno hay que vaciar todos los componentes bajo riesgo de formación de hielo. En este caso no es
posible realizar el aclarado completo del sistema.
LU-VE recomienda un límite de la temperatura de 8°C.
La anulación del funcionamiento invernal (o instalación vacía) puede producirse a raíz de una histéresis muy alta (mínimo 5K sobre los
+8°C antedichos) o bien, con la primera activación del sistema de pulverización.
En funcionamiento de verano todos los componentes se pueden aclarar. Se debe asegurar que todo el contenido del agua en el sistema
sea sustituido por lo menos una vez. Como referencia LU-VE recomienda una duración del proceso de aclarado de 15 minutos. En caso
de sistemas con tuberías largas este valor se debe controlar y en su caso, modificar.
En la gestión de paradas LU-VE recomienda un aclarado cada 24 horas.
Para asegurar un funcionamiento correcto es necesario inspeccionar y limpiar con regularidad los paquetes adiabáticos, el sistema de
distribución, la bomba y el depósito del agua.
6 ASPECTO HIGIÉNICO
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