j. Inserte el TAS en la parte superior del ligamento sacroespinoso a 2 cm-2.5
cm en sentido medial desde la espina ciática. En la imagen 1, se muestra
la dirección correcta en la que debe aplicar presión al insertar el TAS. El
cirujano debe usar el dedo índice para tocar e identificar el ligamento y para
dirigir la guía retráctil de inserción hasta la ubicación correcta del implante.
El TAS debe colocarse bilateralmente; es decir, uno en cada ligamento
sacroespinoso.
Imagen 1
k. Una vez que el TAS esté correctamente ubicado, haga dos puntos
en el vértice vaginal bilateralmente con las suturas del TAS y la aguja
quirúrgica con ojo en semicírculo proporcionada. Las suturas deben ser lo
suficientemente profundas en los puntos de fijación para evitar desgarros
posteriores.
l. Cierre parcialmente la incisión que realizó en la pared vaginal posterior. En
este punto, guíe el vértice vaginal hacia abajo bilateralmente con la ayuda
del dedo índice y haga 3 nudos consecutivos y 2 nudos de bloqueo hacia los
ligamentos sacroespinosos, pero evite la tensión excesiva.
m. Cierre estándar de la pared vaginal.
n. Antisepsia final. Se recomienda realizar tacto rectal y colocar un tampón
vaginal.
Nota: El bajanudos plástico y su tubo protector se incluyen en el kit para
facilitar el procedimiento de anudar los TAS si el cirujano considera que es
aconsejable.
El tratamiento y los cuidados posoperatorios quedan a criterio del cirujano.
Si es necesario extraer el implante, tenga en cuenta lo siguiente:
Si es necesario extraerlo debido al dolor, le recomendamos que primero
intente cortar todas las suturas que fijan el útero o la cavidad vaginal.
Si los vasos o nervios detrás de los ligamentos sacroespinosos siguen
afectados después de 6 a 8 semanas, es posible que deba quitarse el TAS
del ligamento sacroespinoso. Los riesgos de este procedimiento pueden ser
mayores que los beneficios resultantes de esta extracción, por lo que cada
caso debe evaluarse y decidirse a discreción del cirujano.
22