FINES DE CARRERA A TIEMPO
La gestión de los tiempos de funcionamiento permite controlar la posición de las hojas. Sin embargo se
debe aclarar lo siguiente:
1) Debido a variaciones climáticas, al desgaste de los componentes mecánicos, el comportamiento del
sistema está sujeto a cambios. Un tiempo de funcionamiento programado sin un margen de tolerancia (de
más) puede llegar a no ser suficiente para terminar la maniobra (es decir, a lo largo del tiempo las hojas
podrían quedar entreabiertas). Para evitar esta situación, actuar como se indica a continuación:
1a) Durante la fase de programación se debe mantener en tensión el motor unos segundos después de
finalizar la maniobra de apertura.
1b) El programador gobierna automáticamente un incremento de tres segundos aproximadamente, para
garantizar que después de varias maniobras de inversión el rozamiento de la puerta u otro puedan
ocasionar dicho problema.
Por ejemplo: con la puerta totalmente abierta
Secuencia de los mandos: cierre durante 1 segundo, luego apertura;
Resultado: la hoja pasa a la fase de cierre durante 1 segundo, y a la de apertura durante 1 + 3
segundos, por lo cual los motores siguen estando bajo tensión durante 3 segundos a partir de
cuando se ha alcanzado la apertura completa.
2) A falta de alimentación, el programador, a menos que esté activado el fin de carrera que señala la apertura
o el cierre totales (ver tabla 1 en página 48), pierde la memoria de la posición tomada por la cancela y que
se considera como "totalmente cerrada", para permitir la maniobra de apertura. La gestión de los tiempos
de trabajo garantiza que la maniobra de cierre posterior está completa.
Cuidado: para conseguir esto, al encender el sistema con la puerta en posición de cierre incompleto, es
inevitable que los motores se mantienen bajo tensión, en el primer ciclo de maniobra, durante un tiempo
superior a lo necesario. Esto rige hasta que se finaliza el ciclo con un cierre completo. De hecho, ahora el
programador conoce con exactitud la posición de la puerta.
La particular gestión de los tiempos de trabajo evita someter a esfuerzo el motor de una hoja si esto no es
necesario:
Por ejemplo: sistema de doble hoja batiente
Mando de apertura seguido después de un segundo por un mando de cierre. Puesto que
la hoja 2 aún tenía que empezar a desplazarse (desfasaje fijo en la fase de apertura: 2
segundos) el motor 2 no se acciona en la fase de cierre.
Además, si durante la fase de movimiento ya se ha realizado el desfasaje entre las hojas, al reanudarse el
movimiento posteriormente al mando de bloqueo no se tendrá el desfasaje; en cambio éste está siempre
en el caso de inversión del movimiento.
FUNCIONAMIENTO DE LA ELECTROCERRADURA
La electrocerradura se activa sólo en los mandos de apertura/reapertura.
Esto ocurre por cada mando en la primera maniobra después del encendido, hasta el cierre completo; de
ahora en adelante la activación de la electrocerradura se realiza únicamente si la puerta está próxima a
cerrarse totalmente, así evitando activaciones supérfluas.
GOLPE DE ARIETE
El golpe de ariete (que se puede habilitar sólo en la configuración con hojas batientes) con la cancela total-
mente cerrada empieza el movimiento de apertura con el breve cierre de la hoja 1 (1 segundo), para facilitar
el disparo de la electrocerradura. Esta última permanece activada durante unos 2 segundos, o sea el tiempo
necesario para que la hoja 1 empiece realmente la apertura, más un margen de 0,5 segundos.
Esto se hace únicamente con la cancela totalmente cerrada; para las maniobras de apertura sucesivas a
una condición de bloqueo con las hojas abiertas, el golpe de ariete aunque esté habilitado no se ejecuta,
sino se da solamente la activación de la electrocerradura.
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