• El profesional sanitario de la odontología tiene la
responsabilidad de determinar cuándo es adecuado usar el
producto y conocer:
• el estado de salud de cada paciente;
• las técnicas dentales que se deben llevar a cabo;
• la recomendaciones de los organismos públicos y del
sector aplicables respecto al control de las infecciones
en el entorno de los servicios sanitarios odontológicos;
• los requisitos y las reglas para una práctica segura de la
odontología; y
• estas instrucciones de uso en su conjunto (incluidas
la sección 4 Precauciones, la sección 6 Control de
infecciones y la sección 10 Cuidado del sistema).
• Este producto está concebido para prestar asistencia a la hora
de eliminar la susceptibilidad a la retracción de los líquidos
bucales. Para garantizar una protección adecuada contra la
contaminación cruzada de otros dispositivos conectados a
la unidad dental, se recomienda encarecidamente instalar
funciones de antirretracción en la unidad dental. Además,
debe realizarse un mantenimiento correcto de la unidad dental
y de las funciones de antirretracción y deben pasar pruebas
periódicas. Para obtener más información, póngase en contacto
con el fabricante de su unidad dental.
• Este producto no se debe utilizar en los casos en los que la
asepsia se considere necesaria o conveniente a juicio y criterio
del profesional sanitario de la odontología, a menos que
también se emplee de manera conjunta un kit de lavado estéril
(n.º de ref. 81340).
• Este producto no se debe utilizar como un sistema abierto de
agua (por ejemplo, conectado a un sistema de agua público)
durante períodos en que exista riesgo de contaminación del
agua. Los profesionales sanitarios de la odontología deben
interrumpir el uso y ponerse en contacto con el organismo de
recursos hídricos local para determinar cuándo será seguro de
nuevo usar el producto. Cuando pase el riesgo, el organismo de
recursos hídricos deberá proporcionar pautas de desinfección
de las tuberías. Se deberán purgar todas las entradas de agua
procedentes del sistema público de abastecimiento de agua (por
ejemplo, grifos, tuberías o equipo odontológico) de conformidad
con las instrucciones del fabricante y durante un mínimo de
5 minutos.
• Antes de empezar el tratamiento, los pacientes deben enjuagarse
con un antibiótico conocido como el gluconato de clorhexidina
al 0,12 %. El enjuague con antibiótico reduce la posibilidad de
infección y también el número de microorganismos liberados en
forma de aerosol durante el tratamiento.
• Es muy recomendable el uso de un evacuador de saliva de gran
volumen (HVE) para reducir la cantidad de aerosoles liberados
durante el tratamiento.
• No seguir las recomendaciones relativas a las condiciones de
funcionamiento ambientales, incluida la de la temperatura del
agua, podría ocasionar lesiones en los pacientes o usuarios.
• Maneje la boquilla Cavitron con precaución. Un manejo
inadecuado de la boquilla, específicamente de la punta de la
boquilla, podría ocasionar lesiones y/o contaminación cruzada.
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