Advertencias para la eliminación correcta del producto de acuerdo con la Directiva Europea
directiva 2011/65/UE.
Al final de su vida útil, el producto no debe eliminarse con los residuos domésticos. Puede
entregarse a los centros de recogida selectiva de las administraciones municipales, o bien a
los vendedores que ofrecen este servicio.
Al eliminar un electrodoméstico de manera separada, se contribuye a evitar las posibles
consecuencias negativas para el medio ambiente y para la salud que derivan de un
tratamiento inadecuado, permitiendo además recuperar los materiales que lo constituyen y
así obtener un importante ahorro de energía y de recursos. Para recordar la obligación de
eliminación separada de los electrodomésticos, se halla aplicado en el producto el símbolo
del contenedor de basura móvil tachado. Quien elimine abusivamente el producto incurrirá
en las sanciones administrativas previstas por la normativa vigente.