Aurlane CAB264 Mode D'emploi page 32

ES
Utilización
¿Está completa la instalación de su cabina de ducha?
Antes de llenar de agua tu cabina, es imprescindible comprobar la estanqueidad de toda la cabina y asegurarte
de que la presión del agua que circula en el circuito no es demasiado alta. La presión debe estar entre 2 y 4
bares. Demasiada presión podría dañar la tubería y causar fugas.
Para evitar cualquier infección bacteriana, es importante limpiar la cabina de ducha con regularidad. Siga las
instrucciones de limpieza recomendadas por el fabricante del producto de limpieza a utilizar. Atención, no
utilice productos de limpieza que contengan acetona, cloro o agua amoniacal (lejía). El uso de dichos productos
provocaría automáticamente un rápido deterioro de los elementos cromados.
Precaución en el contexto del uso de la cabina por parte de los niños: no deje el uso de la cabina sin supervisión
de un adulto, solamente dejar el uso a niños responsables que hayan entendido las instrucciones dadas por los
mayores.
Para todas las personas con movilidad reducida, disposición sensorial o mental, el uso de esta cabina debe
realizarse bajo supervisión de un adulto o que hayan recibido instrucciones de las personas responsables de su
seguridad.
No utilice aparatos eléctricos dentro de la cabina.
Limpie y mantenga su cabina:
Limpieza regular
Utilice una esponja de ducha con un detergente de pH neutro (limpiador doméstico multi superficies, líquido
lavavajillas). Si es difícil eliminar la suciedad, use vinagre de alcohol blanco diluido en agua y luego enjuague
con agua limpia. Retire la tapa del tapón de desagüe con regularidad para eliminar el posible cabello que pueda
causar una obstrucción.
Limpieza de cal
Use un paño suave y zumo de limón y/o vinagre de alcohol blanco tibio, luego enjuague con agua limpia. La
forma más fácil de mantener limpias las puertas y la ducha es usar un limpiacristales de goma. Si limpia las
paredes de la cabina directamente después de ducharse, minimizará la formación de cal en las superficies.
→ Nunca use un limpiador que contenga granos de pulido, acetona, cloro, amoníaco (lejía) o cualquier otro
limpiador agresivo a base de ácido. Este tipo de productos reacciona con efectos como rayones, contra el
cromo.
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