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almohadilla para que no se suelte.
Uso de succión (D)
El polvo se extrae de la superficie de trabajo
mediante un adaptador y una aspiradora conectada.
Coloque el adaptador (3) en el zócalo.
Conecte la manguera de su aspiradora al adaptador
(3).
encendido y apagado (E)
Puede encender la lijadora vibratoria manteniendo
presionado el interruptor (1).
Puede apagar la lijadora soltando el interruptor (1).
Cambie la lijadora a funcionamiento continuo
presionando y manteniendo presionado el interruptor
(1), presione simultáneamente el botón de bloqueo
(2) y luego suelte el interruptor.
Presione y suelte el interruptor (1) para apagar la
lijadora del funcionamiento continuo.
Usar
Siempre sostenga la lijadora firmemente en su mano.
Siempre colóquelo ligeramente sobre la superficie
que desea lijar.
Atención: el primer contacto con el material lijado
puede hacer que la lija se „arroje".
Se recomienda utilizar movimientos circulares al
trabajar.
Revise el papel de lija regularmente y reemplácelo
cuando esté desgastado.
Si necesita procesar irregularidades más grandes
en el material, se recomienda trabajar con lijas de
diferentes tamaños de grano. Se recomienda grano
60 para lijado basto, grano 80 para lijado basto medio
normal y grano 120 para acabado fino.
Tratamiento superficial mediante lijado
La almohadilla de papel de lija se mueve en
pequeñas órbitas circulares. Por lo tanto, los granos
se cortan gradualmente en todas las direcciones.
Dado que el movimiento es circular, no importa cómo
sostenga o mueva la lijadora, y rara vez es necesario
aplicar presión adicional a la herramienta. El principio
básico a la hora de lijar es utilizar una lija adecuada
que alise las irregularidades de la superficie. Si
usas el si el papel es rugoso, la superficie no se
suavizará, sino que por el contrario se volverá aún
más rugosa. El papel de lija demasiado fino eliminará
las irregularidades existentes muy lentamente o no
las eliminará en absoluto. El primer lijado de algunos
materiales puede requerir una lija más gruesa,
mientras que las superficies más finas requerirán una
lija de grano medio. En caso de duda, comience con
un papel más fino. Si los resultados son deficientes,
utilice un papel más grueso, pero asegúrese de
volver a cambiar a un papel más fino si comienzan
a aparecer líneas más gruesas. Tenga cuidado de
no lijar los bordes y el material de revestimiento,
especialmente con papel más grueso. Un viejo truco
muy conocido para crear una superficie supersuave
es „aumentar el grano". Humedezca la superficie ya
lijada con un paño húmedo o una esponja y déjela
secar por completo. Debido al agua, algunas fibras
de madera se hincharán más que otras, haciendo
que la superficie se vea más áspera que antes. Lije
con papel fino, elimine las partículas levantadas.
El resultado será una bonita superficie lisa. Sin
embargo, NO utilice este método en superficies
enchapadas, ya que podría liberarse humedad en el
enchapado.
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