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CUIDADO Y MANTENIMIENTO
Mantenimiento de la estufa
Para la limpieza diaria de marcas, huellas
dactilares y derrames sin azúcar, aplique un
producto de limpieza para estufas de cerámica.
Enjuague y seque con un paño limpio o una toalla
de papel.
En el caso de derrames por ebullición, derretidos
y derrames de azúcar caliente sobre la estufa,
retire el derrame o el alimento inmediatamente con
una navaja de cerámica para estufas, pero tenga
cuidado con las superficies de cocción calientes.
Sostenga la afeitadora en un ángulo de 45 grados
y raspe la comida derramada en un área fresca de
la estufa, luego límpiela con un paño de cocina o
una toalla de papel. Los derrames grandes deben
eliminarse de inmediato para asegurarse de que no
se horneen sobre la superficie de la estufa.
Las perillas de control son removibles y se pueden
limpiar con un paño suave y agua tibia.
Para un residuo quemado
Deje que la estufa se enfríe y, a continuación,
extienda unas gotas de producto de limpieza para
estufas de cerámica en toda el área de residuos
quemados. Frote esta área con una almohadilla
de limpieza que no raye y si queda algún residuo,
repita estos pasos.
Para un gran residuo quemado
Deje que la estufa se enfríe, luego use una navaja
de cerámica para estufas en un ángulo de 45
grados y raspe para eliminar los residuos. Después
de raspar los residuos pesados, esparza unas gotas
de producto de limpieza para vitrocerámicas en
toda el área de residuos quemados. Frote esta área
con una almohadilla de limpieza que no raye.
Interior del horno de porcelana
Con el cuidado adecuado, el interior de porcelana
esmaltada conservará su acabado durante muchos
años.
Se puede usar agua y jabón para limpiar el
interior. Las salpicaduras o derrames fuertes pueden
requerir limpieza con un limpiador abrasivo suave.
No permita que derrames con alto contenido de
ácido, como leche, tomates, jugos de frutas o
relleno de pastel, permanezcan en la superficie.
Pueden causar manchas opacas incluso después de
la limpieza.
El amoníaco doméstico puede facilitar la limpieza.
Coloque 1/2 taza de amoníaco en una fuente
de vidrio poco profunda y déjelo en un horno
frío durante la noche. Los vapores de amoníaco
ayudarán a aflojar la grasa y los alimentos
quemados.
Precauciones sobre el uso de limpiadores
de hornos en aerosol
No rocíe limpiador de hornos sobre los controles e
interruptores eléctricos, ya que podría provocar un
cortocircuito y provocar chispas o un incendio.
No rocíe limpiador de hornos directamente sobre
los elementos calefactores del horno.
No permita que quede una película del limpiador
de hornos en el sensor de temperatura, ya que
podría hacer que el horno se caliente de manera
inadecuada. El sensor está ubicado en la parte
trasera del horno. Limpie con cuidado la bombilla
después de cada limpieza del horno, teniendo
cuidado de no mover el sensor, ya que un cambio
en su posición podría afectar la forma en que
hornea el horno.
No rocíe limpiador de hornos en el exterior de la
puerta del horno, manijas o cualquier superficie
exterior del horno, gabinete o superficies pintadas.
El limpiador puede dañar estas superficies.
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