Condiciones de temperaturas
Los muebles para exteriores no están hechos para soportar condiciones de baja temperatura, y menos aún temperaturas invernales,
que pueden afectar su funcionamiento y condición de superficie. También son sensibles a la humedad ambiental. Por lo tanto, es
recomendable almacenarlos en un lugar seco, ventilado y cerrado. La lona no es necesaria. Antes de cualquier almacenamiento,
limpie y seque los productos, para evitar la aparición de olores desagradables o moho.
Si no tiene una habitación seca, ventilada y cerrada, el uso de una lona con un sistema de ventilación es esencial para cubrir los
muebles que permanecen. Una cubierta protectora permite reducir el impacto de las agresiones externas (daños causados por
árboles, animales, contaminación, etc.) a lo largo de su vida útil. Si el suelo está mojado, es aconsejable insertar una cuña entre el
suelo y las patas para evitar la transferencia de humedad. En el caso de una mesa que inverna en el exterior, dar un ligero ángulo
también evita la acumulación de agua y hojas en la lona.
En caso de que no se utilice durante un periodo de tiempo prolongado, si no se siguen las recomendaciones de almacenamiento,
producirá un desgaste acelerado de su superficie y de su buen funcionamiento.
Protección de la tornillería
El acero es un material que está expuesto a elementos externos (humedad, vientos salinos) y se oxidará de forma natural. Para
evitar que aparezca la oxidación, nuestro mobiliario de acero se suministra de origen con un tratamiento de epoxi. No obstante,
esta capa desparece progresivamente bajo la acción de elementos exteriores y debe renovarse con regularidad. Para ello, aplique
una bomba antioxidante al menos una vez al principio y al final de la temporada (disponible en ferreterías o tiendas de bricolaje).
Aumente la frecuencia del tratamiento cada 3 meses para los muebles expuestos a los vientos salinos a la orilla del mar.
La tornillería debe someterse también a un tratamiento parecido.
Si el óxido aparece de todos modos, puede eliminarse fácilmente con productos comunes como el vinagre blanco o el ácido cítrico.
Un paño empapado en betún para automóviles también puede permitirle eliminar manchas de óxido. Termine con un aerosol
antioxidante para proteger la tornillería y aplíquelo regularmente.